Echar de menos (Día de la poesía)

Se echan de menos

esas tardes filosóficas

cargadas de risas y cervezas

o los abrazos envueltos en auras misteriosas.

Se echan de menos

las siestas entre tus piernas

los enredos de tus dedos en mi pelo

o los besos fugaces antes de partir en tren.

Se echan de menos

los viajes inesperados

los atardeceres en el mar

o los amaneceres entre edificios de Gran Vía.

Se echa de menos

“echar de menos”

Deva

Tardes de verano.

Te observo desde la esquina del sofá,

siendo una simple silueta

a la luz del ventanal.

Recostada en tu habitual mala postura

entre dos sillas carcomidas por el tiempo,

con tu viejo libro de hojas amarillas

aquel,

que compramos en un mercadillo

perdido del bullicio de la gran ciudad.

Y así pasan las tardes de verano

tú,

en tu mundo de fantasía

y yo

creando el mío a tu lado.

Deva